Este jueves, la Gaceta UNAM publicó una modificación al “Acuerdo por el que se suspenden reuniones académicas, de difusión y culturales, autorizaciones para realizar viajes para asistir a eventos académicos y recibir intercambios académicos o a profesores e investigadores en estancias académicas”, la misma extiende el plazo previamente publicado para llevarlo hasta el 4 de enero de 2021.

La máxima casa de estudios acordó la suspensión de actividades presenciales desde el 15 de junio, en atención a la salud de la comunidad universitaria. En el comunicado para extender el plazo argumenta que “a pesar de las medidas de confinamiento, no ha sido posible mitigar los efectos de la pandemia, lo que obliga a continuar con ellas y reforzarlas en tanto no se cuente con las condiciones necesarias para un retorno seguro”.

Tras el reinicio de clases en UNAM por vía remota, uno de los problemas más relevantes que han notado los funcionarios de la institución educativa es la posible deserción que una buena parte de su matrícula, derivada de la crisis económica y social que la pandemia de COVID-19 trajo consigo.

Es por ello que la Universidad ha planteado implementar estrategias, cuyo objetivo es evitar que la población estudiantil deje sus estudios. Una de las propuestas más relevantes en este sentido es la llamada “amnistía académica”, la cual, entre otras cosas, permitirá a los estudiantes darse de baja de manera temporal si ningún tipo de castigo en su historial, con el fin de que retomen sus estudios posteriormente.

De acuerdo con una entrevista que el secretario general de la UNAM, Leonardo Lomelí Vanegas, le dio al diario Milenio, lo deseable es que los estudiantes no abandonen sus estudios durante este periodo crítico; sin embargo, la institución tiene claro las dificultades económicas y familiares que pueden estar pasando.

Es por ello que ha planteado la oportunidad de que los alumnos hagan una pausa a sus clases sin que esto signifique una complicación en el tiempo que, por reglamento, tienen para cumplir con su estancia académica en la institución.

“Podrían dejar de estudiar este semestre sin que cuente en su historial académico y regresar el siguiente. Es una especie de amnistía académica para permitir que todos los estudiantes que tuvieron dificultades tanto en el semestre anterior como en el que está iniciando puedan darse de baja temporalmente y regresar para continuar con sus estudios”, explicó para el medio de comunicación.

El funcionario de la UNAM también detalló que esta medida se dio a conocer a la población estudiantil desde el semestre pasado, pero en los próximos días será aprobada por la Comisión de Trabajo Académico del Consejo Universitarios, el cual será el organismo encargado de dar a conocer más detalles.

Otra parte de esta “amnistía académica” consiste en el préstamo y donación de 20,000 equipos digitales entre sus estudiantes con problemas económicos, con el fin de que no tengan dificultades con el nuevo curso a distancia, pues saben que este tema podría suponer un reto para muchos alumnos.

La UNAM cuenta con aproximadamente 350,000 alumnos en todos los niveles educativos, de los cuales el 34% no cuentan con un ordenador y el 14% no dispone de internet en casa, según el resultado preliminar de una encuesta realizada por la propia institución y publicado en junio.